El documento presentado detalla que, durante el accidente ocurrido el pasado miércoles 29 de noviembre, el conductor de la patana, identificado como Camilo Terrero Cuevas, estaba manejando a una velocidad excesiva y de manera temeraria y descuidada, lo que provocó la colisión con el autobús.
La Fiscalía de San Cristóbal señala en el escrito que este accidente aún se encuentra en fase de investigación, por lo que tanto el número de fallecidos como el de heridos podría variar a medida que avance la pesquisa o a medida que las lesiones de las víctimas evolucionen.
Además, la solicitud de medida de coerción detalla que poco después del accidente, Camilo Terrero Cuevas se entregó voluntariamente a las autoridades, solicitando protección para su integridad física, ya que tanto familiares como conocidos de las víctimas lo estaban buscando.
Hasta que se lleve a cabo la audiencia de la medida de coerción, el conductor permanecerá bajo la protección de las autoridades. Según las investigaciones de las autoridades, existe preocupación sobre la posibilidad de que el conductor no garantice su comparecencia a los procedimientos judiciales y que pueda representar un riesgo de fuga debido a su falta de arraigo, por lo que se solicitará su prisión preventiva.